LA HISTORIA DE GISELLE (Texto 2)

Esto era una chica llamada Giselle que desde que era pequeña le encantaba  ir al colegio, con sus amigas, etc… Era una niña muy rara, era la empollona de la clase  junto con su mejor amiga Sara, que también era empollona. Pero Sara era más sociable  porque desde pequeña tenía muchas amigas y familiares. En cambio Giselle no tenía familia. Todos habían muerto en un  accidente de coche en la carretera: un camión chocó contra ellos. Y la única que se salvo fue Giselle. Sus padres, su hermano y su perro murieron en la ambulancia. Todos de un infarto, menos Giselle que se salvó de morir de un infarto porque los médicos solo tenían descarga eléctrica para uno. Y  decidieron que a la más pequeña, Giselle. No contó a nadie que después de morir sus padres, se fue corriendo a su casa y al cargar su móvil, en un enchufe le dio una descarga eléctrica muy fuerte… Y se metió energía en su cuerpo como en una pila, y cada vez que toca un enchufe le dan descargas eléctricas, pero a ella no le duelen las descargas.

Un día yendo hacia el colegio con su amiga, Giselle saludó a un señor, que le parecía un conocido. Ella lo saludó, y él no contestó y su amiga Sara le dijo: ¿a quién saludas, Giselle?. NO HAY NADIE. Giselle muy confusa, dijo que había saludado al vecino de enfrente de su casa. Sara respondió que ese señor había muerto hacia casi 1 mes. Con lo cual Giselle pensó que había sido su imaginación pero eso no era verdad, porque después del cole volvió a saludar a un niño, que hacía 4 años estaba muerto. Así  que Giselle buscó por la biblioteca un libro llamado  El libro de los muertos.  Cuando lo encontró, se lo leyó, de pe a pa, y descubrió que  un muerto nunca sube al cielo si no ha terminado su labor en la Tierra. Con lo cual Giselle le dijo a Sara que veía a los muertos. Como es normal Sara no se lo creyó y la tomó por loca. Al día siguiente, Giselle decidió ayudar a los espíritus, que no habían subido al cielo, para que terminaran su labor. Así que Giselle ayudo al niño, que se encontró de camino al colegio y de repente el niño la atravesó. Giselle se puso muy pálida del terror, que en ese momento sentía por sus venas. Así que le dijo: hola al niño. Y el niño le dijo: ¿me ves? Ella dijo:  pues claro que te veo. Y el niño respondió: ¿y sabes por qué me ves?, Ella respondió: NO. Entonces el niño respondió que la veía porque en su accidente, su padre,  su madre, su hermano y su perro reunieron todas las fuerzas mortales para salvarle la vida. La niña respondió: entonces estoy muerta. El niño dijo: estás entre dos mundos paralelos. El de los vivos y el de los muertos. Así que Giselle le dijo a su mejor amiga, que estaba ayudando al niño ese al que saludó después del colegio.

Sara muy cabreada la dijo que todo eso era un sueño y llamó al 112 diciendo que su mejor amiga Giselle veía a los muertos. Vinieron corriendo los del manicomio para llevársela con ella. Cuando la chica Giselle ya tenía bastantes años, el niño que saludó aquel día después del colegio, encontró El libro de los muertos y según lo que ponía consiguió hacerse de carne y de hueso. Empezó a comerse el cerebro de toda la gente. Nadie creyó a Giselle por lo que se podrían haber salvado todos de morir y la era de la Tierra se había terminado. Ahora la dominaban los zombies.

Carlota Mateo. 2º ESO. Desdoble de Lengua.
Taller de Escritura